El gas licuado de petróleo (GLP) es un combustible compuesto por propano y butano, que es fácil de licuar y puede utilizarse como combustible para automóviles. Este es un nuevo tipo de combustible alternativo ampliamente aceptado en todo el mundo.
Aunque está muy extendido, el uso de la GPL tiene muchos factores a considerar. Por lo tanto, Dincorsa comparte las principales fortalezas y debilidades del uso de este gas.
Ventajas
– El GLP es mucho más económico que la gasolina. Ahorre hasta 40%
– Los costos de mantenimiento son mucho más bajos que los de otros tipos de vehículos.
– Las emisiones de óxido de nitrógeno se reducen en un 68% y las emisiones de dióxido de carbono en un 15%, lo que contribuye a las preocupaciones ambientales.
– El LPG es menos abrasivo para los cilindros y los segmentos del motor que otros combustibles, lo que ayuda a prolongar la vida útil del motor.
– Los problemas son menos comunes porque el sistema carece de componentes complejos y costosos.
– System Repair es simple y fácil de realizar.
– El GLP es tan potente como cualquier otro combustible y cumple con la norma UN 67R01R67 de resistencia a impactos y choques. Además, existen todas las precauciones contra fugas y desconexiones.
– El RACE (Real Club del Automóvil de España) ha confirmado que el GLP es extremadamente seguro y no supone ningún riesgo para los residentes.